Por parte de César Milani
Morales también confirmó que posee información de que en la sede del Ejército, en el Edificio Libertador, en una sala del séptimo piso, se realizan tareas clandestinas de espionaje.
Por su parte, el diario Clarín informó que “fuentes militares consultadas por Clarín confirmaron que Milani dispuso en forma clandestina y por afuera del sistema formal “interceptar las comunicaciones y hacer un seguimiento de Santoro”. Incluso, dieron el nombre de un suboficial de inteligencia que estaba a cargo del operativo y cuyo nombre no se publica por cuestiones legales. Las leyes de Defensa y de Seguridad Interior prohíben taxativamente a las FF.AA. hacer tareas de inteligencia interna”. Agrega que “en la sala de situación hay “mapas” de cada causa judicial con los nombres de jueces, fiscales y testigos”.
El periodista Daniel Santoro dijo a Fopea que “estas denuncias generan mucha impotencia porque este tipo de maniobras son muy difíciles de probar de manera material en la justicia, ya que son clandestinas. Estoy resignado”. Y agregó: “Mis fuentes me confirmaron que hay otro periodista que está siendo investigado pero no puedo revelar su nombre por expresa solicitud del colega”.
Acción de Fopea: Investigó el caso y se pronunció públicamente