Los cronistas de Perfil.com y Canal 26 llegaron a las cercanías de la casa velatoria para informar sobre la muerte de Patricia Villares, esposa del dirigente sindicalista Pablo Moyano, pero individuos que actuaban como presuntos custodias no permitieron la cobertura del acontecimiento y forzaron a los periodistas a retirarse.

La misma noche del 16 de diciembre, el periodista de Perfil se ubicó frente a la sala velatoria. Mientras sacaba fotografías se le acercó un hombre que le preguntó en qué medio trabajaba e inmediatamente dijo: “No saques fotos, no hagas nada, tomatelas”. Ante la negativa, el hombre fue poniéndose cada vez más agresivo. El periodista terminó de sacar fotos acompañado por un policía, pero no pudo realizar la cobertura.

Al móvil de Canal 26, ubicado en la esquina de enfrente y en diagonal a la sala velatoria, se acercó otro hombre que, dirigiéndose primero al camarógrafo y después hacia la movilera, dijo: “Desarmen o les rompo todo el móvil”. El jefe de la unidad de exteriores, también presente, intentó explicarle que ellos estaban trabajando, que todo era con mucha prudencia y distancia para respetar a la familia. El hombre permaneció parado unos momentos mirándolos agresivamente hasta que los técnicos comenzaron a levantar los cables para irse, y recién ahí se alejó.

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