FOPEA - Logo - Light

Fotógrafo de Rosario fue detenido arbitrariamente

Cuando se identificó como periodista lo amenazaron de muerte

El reportero gráfico Alejandro Guerrero fue detenido arbitrariamente por varias horas por la policía en Rosario (Pcia. de Santa Fe). Además, fue brutalmente golpeado y no se le permitió realizar llamadas telefónicas. A esto se le suma el ensañamiento que tuvieron los efectivos con Guerrero cuando se identificó como trabajador de prensa, y las amenazas de muerte que recibió por parte del personal policial de la comisaría 3ra. de esa ciudad santafesina.

Guerrero es jefe de la sección Fotografía del diario El Ciudadano, corresponsal de varios medios nacionales y empleado de la Subsecretaría de Comunicación Social de Santa Fe.

El hecho tuvo lugar en la tarde del miércoles 15 de diciembre, cuando Guerrero fue testigo ocasional del desalojo de unos jóvenes que estaban recostados en unos colchones en la vía pública. Personal policial quiso obligarlo a retirarse, pero como el fotógrafo se negaba le dijeron: “Si vos no te querés ir, te venís con nosotros”, y lo llevaron a la seccional 3ra. de la Policía de Rosario. Allí lo mantuvieron encerrado y lo golpearon reiteradas veces. Guerrero manifestó que mientras le pegaban puñetazos le decían: “¿Así que vos sos protector de pobres?” y “¿así que vos querés copar la parada?”.

Guerrero estuvo detenido por más de seis horas. En ese tiempo no pudo realizar ninguna llamada telefónica y tampoco le dijeron por qué delito estaba imputado. Hasta ese momento, el fotógrafo prefirió no identificarse como periodista. Cuando finalmente, luego de la golpiza, Guerrero dijo que era reportero gráfico y debía avisar al diario sobre su ausencia, uno de sus agresores lo increpó diciéndole: “Si no te quedás en el molde, te mato”.

El periodista radicó la denuncia en Tribunales de Rosario y un médico legista constató las lesiones producto del abuso policial. A raíz del episodio toda la cúpula policial de Rosario fue reemplazada: el jefe de Orden Público Aníbal Rodríguez; el inspector de zona, Walter Miranda; el jefe de la comisaría 3º, Adolfo Luna, y el subjefe de esa dependencia. Lo mismo sucedió con los agresores: el sargento primero Luis Barrionuevo y el suboficial Ignacio González, que llevan más de 20 años en la fuerza.

Acción de Fopea: Investigó el caso y se pronunció públicamente

administrator

Related Articles